Columnas

Friday, January 27, 2023

 Homenaje a Martí y Fidel: Patria Unida

Por Hilda Pupo Salazar

hilda@ahora.cip.cu

El patriotismo es de cuántas se conocen hasta hoy: la levadura mejor de todas las virtudes humanas”, máxima de José Martí Pérez con absoluta vigencia para Cuba, en el aniversario 170 de su natalicio.

Este valor moral  siempre lo lleva Martí en su alma: “la patria como ara, humanidad” y al patriotismo: entrega, cumplimiento del deber, sacrificio, rechazo y enfrentamiento,  como lo caracteriza su fructífera existencia, al caer en combate el 19 de mayo  de 1895, en Dos Ríos, con solo  42 años.

“El patriotismo no es más que amor” lo afirma en 1893 al escribir en el álbum de firmas de la hija mayor del Generalísimo Máximo Gómez, mientras en  su sección En Casa, del periódico Patria, en el mismo año, reafirma: “Patria es la suma de los amores todos, que sin ella son como flor de aroma, que se va toda al viento”.

  Defiende  que no puede ser el patriotismo  ridículo, ni superficial afecto por elementos  del paisaje físico, o por pedazos de terreno sin libertad. Es el amor  por esa comunidad  de intereses, unidad de tradiciones, unidad de fines, fusión  dulcísima y consoladora de amores y esperanzas;  un deber santo que purifica y sublima a los hombres… 

Patriotismo no es el sentido, sino el sentimiento de la nacionalidad, el amor por la bandera,  estremecerse al escuchar el Himno de Bayamo, venerar a los héroes y mártires, a los símbolos y despreciar a quienes intenten mancillar al país, todo lo cual encierran, en sí mismos, a la nación cubana, su historia e identidad.

Desde el mismo 10 de octubre de 1868, al dar el grito de guerra  Carlos Manuel de Céspedes, hasta hoy la lucha por nuestra soberanía es una gran batalla de ideas en constante combate por la  verdad,  humanismo,  hermandad,   fraternidad,  libertad,  cultura,  igualdad , justicia y decisión de ser independiente en la “ misma narices del más poderoso Imperio en este mundo”.

En la cosmovisión martiana, el concepto Patria,  sirve de sostén a toda su vida en su fecunda y extraordinaria obra intelectual y revolucionaria, en  relación dialéctica con otros valores vitales como: el amor,  deber,  honor y  dignidad.

El poema Abdala, escrito 5 días antes de cumplir los 16 años,  es un reflejo de su futura vida, como digno cubano y  patriota.

Aquel axioma de que “Trincheras de ideas valen más que trincheras de piedra”, palpita cuando declama su Abdala: “Que prepare su gente, y que a sus lanzas Brillo dé y esplendor. Más fuertes brillan Robustas y valientes nuestras almas”

“El deber de un hombre está allí donde es más útil” sentencia en la última  carta a su idolatrada madre, el 25 de marzo de 1895 y que ya comparte antes, el 10 de octubre de 1890, en el aniversario 22 del Grito de Yara, con  sus compañeros en el Hardman Hall, de Nueva York: “… el verdadero hombre no mira de qué lado se vive mejor, sino de qué lado está el deber; y ese es el verdadero hombre”.

“¿Acaso crees/ Que hay algo más sublime que la patria?”, le pregunta Abdala a su madre. Un sentir que reitera  Martí una y otra vez, durante su sacrificada vida: “El martirio por la patria es Dios mismo, como el bien, como las ideas espontánea  generosidad universales”, lo significa en  1871 y en 1888 afirma: “El patriotismo es más bello cuando se muere por él, que cuando se recibe su recompensa”.

Este  hombre sincero, de donde crece la palma sintetiza los sentidos que identifican plenamente su  época y, en su caso, por más de una intensidad, los de una nación. Una obra tan temprana  muestra el patriotismo como motor impulsor, para hacerlo más auténtico  y universal al pertenecer a todos los tiempos.

“¿En qué patria puede tener un hombre más orgullo que en nuestras repúblicas dolorosas de América, levantadas entre las masas mudas de indios, al ruido de pelea del libro con el cirial, sobre los brazos sangrientos de un centenar de apóstoles? De factores tan descompuestos, jamás, en menos tiempo histórico, se han creado naciones tan adelantadas y compactas”, dice en  1891, cuando ya sabe las desbordantes ambiciones del Norte Revuelto y Brutal y quiere evitarlo con la liberta de Cuba  y Puerto Rico.

El estudio, cada vez más profundo, de la vigente obra martiana es una necesidad impostergable en el proceso educativo cubano,  como vía fundamental para desarrollar y consolidar la educación patriótica, entre las nuevas generaciones, conjuntamente con valores como el colectivismo,  solidaridad,  espíritu de sacrificio,  justicia,  modestia y amor al  trabajo.

En el llamado de Díaz-Canel  “a pensar como país” tiene en Martí, con su total entrega a la patria, como luz de futuro y la fuente ideológica más significativa en la formación y desarrollo del pensamiento de Fidel Castro, el mejor cimiento para que  todos nos entreguemos, en cuerpo y alma, al servicio de la nación, sacando el mayor provecho de la fuerza más formidable y poderosa de la Revolución: Su Unidad, desde el entusiasmo, responsabilidad ciudadana y compromiso para la prosperidad que necesitamos.

Esa voluntad, de Martí y de quienes creyeron en él,  vertida en esta estrofa  de “Abdala”: “¡A la guerra corred!¡A la batalla,/ Y de escudo te sirva ¡oh patria mía!/ El bélico valor de nuestras almas.”, “¡A la guerra corred, nobles guerreros, / Que con vosotros el caudillo marcha!” y “¡Corramos a la lucha, y nuestra sangre/ Pruebe al conquistador que la derraman/ Pechos que son altares de la Nubia, Brazos que son sus fuertes murallas!” Sentido equivalente al de “A las armas, valientes corred” del Himno de Bayamo escrito por Perucho Figueredo y al de “Aux armes citoyens!”, de la “Oda a los Franceses”, firmada por Ecouchard, en 1762.

Patriotas por un mandato raigal (“Y nos manda el honor/ y Dios nos manda”). Con lo que hace confluir razones éticas y espirituales, como antes Félix Varela con su “No hay patria sin virtud, ni virtud con impiedad”.

Un compromiso llevado hasta las últimas consecuencias, resumido en  un  “Morir por la patria es vivir” de nuestro Himno y aludido al final de su poema épico: “¡Nubia venció! muero feliz: la muerte/ Poco me importa, pues logré salvarla/ ¡Oh, qué dulce es morir, cuando se muere/ Luchando audaz por defender la patria!”

Lo mejor que podemos tener, en este aniversario 170 del natalicio del Cubano más Universal  es una Patria Unida, con  la fortaleza de las ideas de Martí y Fidel.

 

 

 

1 comment:

  1. daniel6:46 PM

    Fidel Castro un muy buen ejemplo que llevo su pais a tener exito me encanta es lider quisiera ya tenerlo en nuestro pais me encanta sus musicas cubanas, las escucho siempre y tambien recomiendo para todos aquellos que les gusta escuchar musica les dejo esta pagina , genteflow para descargar musica

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