Columnas

Thursday, April 30, 2015

Concepto Revolución a 15 años


#FidelCastro primero de mayo del 2000


Rodobaldo Martínez Pérez
rodo@enet.cu

“Revolución es sentido del momento histórico; es cambiar todo lo que debe ser cambiado…; es emanciparnos por nosotros mismos y con nuestros propios esfuerzos…; es defender valores en los que se cree al precio de cualquier sacrificio…; es no mentir jamás ni violar principios éticos; es convicción profunda de que no existe fuerza en el mundo capaz de aplastar la fuerza de la verdad y de las ideas…, es luchar por nuestros sueños de justicia para Cuba y para el mundo, que es la base de nuestro patriotismo, nuestro socialismo y nuestro internacionalismo”.
Audio  

Como una síntesis  de las principales líneas que sostienen el significado de la Obra de 1959 para Cuba y el mundo, resulta el último concepto de Fidel de Revolución, dado el Primero de Mayo del 2000, hace 15 años, en él se resumen dos siglos de práctica revolucionaria, primero contra el colonialismo español, luego contra el imperialismo yanqui y en más de 50 años con el pueblo en el poder.

Entre todos los enunciados de la definición, el primero generaliza, porque sin tener en cuenta el momento es imposible concebir la estrategia.  Cada etapa tuvo sus objetivos, los de hoy, por supuesto, no son los mismos que nos propusimos en 1959, cuando la Revolución triunfante se enfrentó a la compleja situación del país: hambre, miseria, analfabetismo, incultura, prostitución y las arcas vacías: robadas y llevadas a Estados Unidos.
Resulta imposible conceptualizar, ahora, a la Revolución cubana, como lo hicimos en un inicio. Hoy, por supuesto, la definición se torna  difícil por los factores incidentes,  tanto externos como internos.
En el 2000 Cuba estaba de lleno en la recuperación del niño Elián,  secuestrado de manera injusta y arbitraria en el Imperio y que meses después regresaría a su Patria.
Fidel dijo en esa ocasión: “Estamos viviendo días de intensa y trascendental lucha. Cinco meses llevamos batallando sin tregua. Millones de compatriotas, todos casi sin excepción, han participado en ella. Nuestras armas han sido la conciencia y las ideas que ha sembrado la Revolución a lo largo de más de cuatro décadas.”
En el 2015, década y media transcurrida, la situación de Cuba es otra. Los principales retos están concentrados en la esfera económica.  El último Congreso del Partido y su Conferencia Nacional puso sobre la mesa la urgencia de rectificar nuestro Modelo Económico, como base de un necesario desarrollo social que incluye las mejoras de la calidad de vida del pueblo y se traduzca en ese Socialismo próspero y sostenible.
  Es por eso que debemos buscar por todos los medios las respuesta eficiente a todos aquellos nudos que traban las potencialidades y la creatividad de la sociedad cubana, y a la vez dirigir su encausamiento a tono con el propósito de preservar el progreso material y cultural de la nación, creando las bases para un nuevo modo socialista de trabajar y de convivir.  Ellos representan el principal instrumento de trabajo para la recuperación y desarrollo ulterior del país.
En congruencia con tales propósitos están la racionalidad y el ahorro como premisas indispensables.  No es posible consumir más de lo que se produce, como tampoco gastar más de lo que se ingresa y es preciso ahorrar para invertir en el desarrollo.
 El reconocimiento de que la principal fuente de financiamiento para el desarrollo del país es el ahorro, se sustenta en aquella expresión formulada por Fidel en la década de 1960: “Solo tendremos lo que seamos capaces de producir”.
Y ahí radica la cuestión. Sin productividad se van abajo todos los pronósticos, porque incide hasta en los salarios y en la fórmula socialista “de cada cual su trabajo, a cada cual según sus capacidades”, tan necesaria en estos momentos para lograr equiparar esfuerzos y resultados.
De manera que  quien más trabaja más salario debe cobrar y viceversa; al igual sucede en cuestiones de calidad: mayor ganancia a labores mejor hechas. Si la gente sabe que los churros entregados le van al bolsillo, se abstendrán de hacer chapucerías.
Eso es  repartir con más justicia, ganar cualitativamente y estimular las fuerzas productivas.
DOCENCIA Y EL CONCEPTO REVOLUCIÓN




Las puntas de la culebra




Hay quienes están dispuestos a decir con su nombre y sus dos apellidos, con su dirección y sus ojos, con su cara y su badajo en riesgo: yo apoyo a Fidel, a Raúl, a la Revolución socialista, soy antimperialista y que salga el sol por donde salga.

Hay otros que tapan sus infidelidades, mientras escriben crónicas a la libertad, gente que espera a ver que va a pasar, y se hacen con sus discursos bien intencionados, de una puerta trasera para cuando “la revolución se venga abajo”, mientras cobran sus críticas en una moneda tan dura como sus juicios.

Hay quien levanta el librito rojo con la misma dignidad que Maiakoski, sabe que por eso no le otorgarán visa, y hasta puede ser que lo anoten en las listas de los excluibles, Y si “esto se cae” lo pueden ir a sacar de su casa con los recién estrenados agentes policiales según el anuncio de "3 días de libertdad para matar". Pero no le importa.

Hay otros que juegan a las máscaras o a tocarles los huevos al tigre sabiendo de antemano es fuerte pero no asesino.  No corren otro riesgo que la mirada torva de un paisano, al que se le puede acusar sin reparo de “burócrata, anclado en el pasado, que no quiere evolucionar” y muchos insultos de moda.

Hay quien se va a ir al desfile del primero de mayo con el corazón abierto, con el retrato de Fidel, con una bandera y no con dos. Ese regresará en la guagua de la calle, la de todos, tomará el ron que puede y terminará el día haciendo el amor con alguien que no le cobrará el sexo, ni sueña con “irse pal carajo de este país”.

Ese no tendrá un guion en el cine independiente, ni en el dependiente, porque su cotidiano heroísmo no parece tener telegenio, a ese no le harán crónicas en On Cuba, ni le pagarán viajecitos para que pruebe los urinarios electrónicos de Europa.

Todos los extremistas son oportunistas. Y todos los oportunistas ayudan al retorno del pasado, unos por apóstatas, otros por sectarios y muchos por ambas cualidades.  Son las puntas de una misma culebra. No importa si es uno que secuestró la Revolución para sí y reparte acusaciones de problemas ideológicos a todo lo que se mueva, o si es en cambio uno de esos que se da golpes en el pecho, desgarrando sus vestiduras como izquierdista y por igual, reparte acusaciones de oficialistas a todo el que no aplauda su brillante verbo.
Hay quien está dispuesto a seguir con la boina verde olivo, sin miedo al futuro, luchando por el futuro

Esos son los impresindibles

De los otros ¡Que Dios nos proteja

Friday, April 24, 2015

Bienal de La Habana




 

Durante los días de la XII Bienal de La Habana, a efectuarse del 22 de mayo al 22 de junio, el escultor Tomás Núñez (Jonhy) mostrará un segmento de su reciente quehacer a partir de una muestra personal titulada Renacimiento, que se exhibirá en la bóveda J8 del Complejo Morro-Cabaña, una de las sedes principales de la importante cita del artes visuales de todos los continentes.
Edición Nro. 723 - Cruzada Teatral Guantánamo-Baracoa (4 de abril al 10 de abril de 2015)

Un gigante rojo en la Bienal de La Habana

Paquita Armas Fonseca • La Habana, Cuba
Viernes, 20 de Marzo y 2015 (12:49 pm)
mágenes: Cortesía de la autora
 

Está a puntode llegar mayo con la Duodécima Bienal de La Habana, y si  en la precedente, un zapato taxi fue la obsesión de la artista santiaguera Liudmila López, esta vez será un zapato canal, también rojo, pero de tamaño monumental, por él que podrán deslizarse menores y adultos.
Publicado en El Diario que a Diario


CubaHoy en Sancti Spíritus

#CubaHoySanctiSpíritus


Hasta la Tierra del Yayabo llegó el equipo de CubaHoy. Sancti Spíritus es una de las primeras siete villas fundadas y en su arquitectura puede observarse esa mezcla de lo colonial con lo contemporáneo

En el centro de Cuba, compartimos con nuestra colega Mary Romero, bloguera y periodista de Radio Fomento, quien nos guió por los lugares más emblemáticos de su cálida y hospitalaria ciudad.

Thursday, April 23, 2015

¿Quiénes son nuestros compañeros? (Parte I: ¿Victimarios, o víctimas?)

El periodista Yoerky Sánchez y el historiador Elier Ramírez, los “fundamentalistas” acusados del “linchamiento” de Fernando Ravsberg
                                                         



Publicado el 21 abril, 2015 de Iroel Sánchez



Varios textos se han escrito sobre un artículo de Fernando Ravsberg acerca de la participación cubana en la Cumbre de las Américas en Panamá publicado originalmente en el sitio OnCuba que ya había difundido otro texto -de título “Ni con Dios ni con el Diablo: Con Cuba”-, de enfoque muy similar al de Ravsberg, invitando “a no ser cómplices de los que por estos días en Panamá, desde sus extremos que están a nada de tocarse, desde posturas fundamentalistas, han vuelto a representarse sólo a sí mismos y dejaron fuera a la nación”.
No creo que sea un “linchamiento” que dos jóvenes que no coinciden con su opinión hayan ripostado desde bitácoras personales, sin concertación previa y con un respeto que reconozco no profeso hacia el aludido, a lo que se ha añadido un mensaje del escritor Miguel Barnet que publiqué bajo el título “Quien quiere quedar bien con Dios y con el Diablo, le sirve la mesa al Diablo” felicitando a uno de los polemistas.
Sé que hay revolucionarios que creen con honestidad que Ravsberg es nuestro compañero. Sin embargo, algo está al revés cuando quien iguala terroristas y sus amigos con todo un grupo integrado por destacados intelectuales, líderes de la ciencia, la academia y organizaciones sociales cubanas -en coincidencia con una intensa campaña en su contra en medios de comunicación e internet- y cobra por hacerlo, aparece como espontáneo y víctima, y quienes le replican espontáneamente -y sin recibir un centavo- son percibidos como victimarios.
Actuar de frente expresando un desacuerdo a título personal, dando argumentos a cara descubierta, nada tiene que ver con reminicencias de un pasado gris. Triste si pasamos de la censura impuesta por el poder institucional a una autocensura que deje el espacio libre a la manipulación y la mentira por temor a ser acusados sin fundamento de querer desenterrar el extremismo y la intolerancia.
¿Qué es sino un verdadero linchamiento lo que se pretendió contra la delegación cubana a los foros paralelos de la Cumbre en Panamá, no desde un blog sino desde un medio de comunicación donde Ravsberg es editor? Lo que se ha añadido a otros espacios de la red, donde he llegado a leer verdaderos disparates sobre lo ocurrido en Panamá como “el capítulo vergonzoso de la Cumbre de los Pueblos”, atacando el espacio de resistencia popular que logró en Mar del Plata 2005, junto a Chávez, Lula y Kirchner, descarrilar el proyecto anexionista del ALCA y confundiéndolo con los Foros convocados por la OEA en Panamá.
¿A dónde se habría llegado por ese camino si dos jóvenes asistentes allí no hubieran tenido el valor de dar su opinión discrepante, no en un bien financiado medio de comunicación, sino en dos blogs?
Continuará…
¿Quiénes son nuestros compañeros? (Parte II y final: La hora de ni con esto ni con aquello)
                  



He escrito antes sobre Fernando Ravsberg. Por ejemplo, comenté su cuestionario a Guillermo Fariñaspor los días en que el amigo de Luis Posada Carriles se ufanaba del muy cuestionable Premio Sajárov del Parlamento Europeo. Estas eran las preguntas a Fariñas de nuestro periodista crítico por la época en que acusaba a los medios cubanos de “periodismo adulón”:
  • ¿Como se siente después de recibir este premio?
  • ¿Por qué cree que se lo otorgaron?
  • ¿Qué le parece el papel de la Iglesia Católica?
  • ¿Qué piensas del cambio en la cancillería española?
  • Se acusa al gobierno cubano de estar desterrando a los presos políticos que excarcela ¿Qué cree usted al respecto?
  • ¿Que hará en el futuro?
(Ver el post “Un hombre de talento“). No había el menor matiz crítico para Fariñas pero en esas mismas fechas  Ravsberg comparaba con Torquemada y Stalin a uno de los proyectos más prestigiosos y auténticamente críticos  de la intelectualidad cubana, la revista Temas, y su director Rafael Hernández le respondía desde el sitio Cubadebate.  
Su habitual olfato periodístico y profesionalidad no impidió a Ravsberg ser el primero en reportar al mundo la “huelga de hambre del aguacate” que tanto hizo reír a los  cubanos allá por septiembre de 2012 para luego callar disciplinadamente cuando se supo el escandaloso destape de aquella farsa (#Elagroporlaventana, nuevo éxito humorístico en #Cuba, ¿será censurado? (+ video). Entonces escribió no sin cierto dramastismo   pero sin ningún sentido crítico acerca de aquel acontecimiento que quedará en los anales del humor nacional:
“Entre los huelguistas se encuentran 7 prisioneros políticos y 5 opositores que están en libertad. El caso más peligroso es el de Marta Beatriz [Roque] dado que sufre de diabetes y podría entrar en crisis apenas 48 horas después de iniciada la huelga.
“Sin embargo, la opositora de 63 años pidió que no se le de atención médica ni se la alimente de forma parenteral. Aseguró que la huelga será hasta las últimas consecuencias y que están dispuestos a morir si el gobierno no responde a sus reclamos.”
¿Qué escribe bien? Cierto. ¿Qué ha sabido aprovechar inteligentemente vacíos y errores de la prensa cubana y que no tuviera el predicamento que tiene si nuestra prensa fuera la que debe ser? También cierto. Tan cierto como que, en palabras de Enrique Ubieta, gusta “de poner una de arena, para justificar dos de cal” y a veces, como en este caso, la cal puede quemar.
Lo que ahora buscó contra quienes acudieron desde Cuba a los Foros de la Sociedad Civil en Panamá ya lo hizo con la delegación al Festival Mundial de la Juventud y los Estudiantes en Ecuador (Ver Trampas para blogueros y cartas… ¿para quién?). Pero no han sido estas dos las únicas veces que ha intentado, cual si creyera manejar a los usuarios cubanos de las redes sociales con un ecualizador, regular su comportamiento y enfrentarlos entre sí:
“Cuando -luego del cambio de la política migratoria cubana- se produjo la estampida viajera de los “opositores” que Estados Unidos paga para un “cambio de régimen” en Cuba, el bloguero de Cartas desde Cuba salió en defensa desde el portal BBC Mundo de los viajeros financiados por la política estadounidense, llamando “blogueros progubernamentales” a quienes denunciaron esa maniobra que ya sabemos de qué fue. Entre sus defendidos de entonces estuvo Eliecer Ávila, un personaje al que la sagacidad periodística del corresponsal de BBC hizo tempranamente famoso.”
Gracias a su objetividad, los lectores de Fernando Ravsberg todavía no se han enterado de si los protagotanistas de la “huelga de hambre” de Martha Beatriz Roque y sus acompañantes -dispuestos a morir comiendo miles de calorías diarias- están vivos o muertos. Tampoco han sabido por él que Eliécer Ávila -quien según Ravsberg  “no entendía que se le prohibiera visitar el lugar donde cayó el Che en Bolivia”- ha dado la vuelta al mundo pagado por potencias extranjeras pero aún no ha puesto un pie en el altiplano de los quechuas y los aymaras.
Un comentario de Diego M. Vidal, periodista argentino que fue su colega de la prensa extranjera en Cuba, habla de sus tiempos como corresponsal de la emisora hispana en EE:UU.  TeleMundo:
“…en el 2003/2004 armó una bronca en [el mercado de Carlos III] para que un guardia lo sacudiera un poco y después hizo que su mujer llamara a la prensa internacional diciendo que le habían disparado… toda una mentira enorme que en ese entonces montó para Telemundo de Miami para quienes trabajaba…. varias veces amagó con irse de Cuba pero ahora la juega del buenito”.
Cuando se sintió bien colocado desde BBC Mundo, Ravsberg pasó el límite que sabía no le iban a permitir y puso en escena su salida de allí como un acto de valentía y censura por su posición crítica hacia Estados Unidos ¿No se parece eso demasiado a la dramaturgia de su bronca en Carlos III?¿Por qué no lo hizo antes sino justo cuando desde la BBC ya había posicionado su blog personal con el mismo nombre del que operaba en la corporación británica y estaba colocado como corresponsal del diario español Público, donde refritaba hacia la izquierda sus trabajos en BBC?  ¿Por qué ahora? ¿No era más urgente haber hecho esas denuncias sobre violaciones de derechos humanos por EE.UU. con W. Bush en el poder que con Barack Obama? Pronto sería contratado como editor de OnCuba, un proyecto  que el bloguero de Miami Emilio Ichikawa  caracteriza de la manera siguiente:
“La mezcla de la promoción de negocios con Cuba (y el levantamiento del bloqueo/embargo), con la incursión ocasional en la crítica del régimen político cubano, es el eje de la estrategia editorial de la revista OnCuba, de Hugo Cancio.
“Cancio, que es una persona habilidosa, le ha sabido cazar la pelea al oficialismo cubano cada vez que este ha resbalado en una decisión impopular; por ejemplo: el cierre de los cines 3-D, el cierre de las “trapi-shoping” o los astronómicos precios oficiales con que salieron los autos.
“Esta tercera posición, llamada de “centro” o “moderada”, suele ser en las transiciones la más artera a la vez que la más “exitosa”.
No es su nacionalidad extranjera, sino quién le paga y la coyuntura política lo que condiciona lo que Ravsberg escribe. Siendo la hora de la “tercera vía” en la política de EE.UU. hacia Cuba, Ravsberg creyó encontrar la oportunidad para imponer lo que fue el diseño principal de esa política de cara a la Cumbre en Panamá: si hay diálogo entre los gobiernos de Cuba y EE.UU. debe haberlo también “entre cubanos”, entendido como el diálogo con la contrarrevolución que estos últimos pagan.  Ese era el titular prediseñado, como detalla el historiador Elier Ramírez:
“La noticia que quería fabricarse era obvia: “Panamá como sede histórica de la reconciliación entre el gobierno de los Estados Unidos y Cuba y -de paso- entre los partidarios del régimen y la oposición interna”
Y Elier da en el clavo cuando dice:
“Ravsberg se equivoca cuando trata de contrastar el hecho de que Raúl y Obama sí pudieron dialogar, mientras la delegación cubana a los foros paralelos fue intolerante, incivilizada, expresión del pasado, al negarse a hablar con los enemigos. “En ese contexto regional es un suicidio político proclamar: nosotros no dialogamos con nuestros enemigos”, señala Ravsberg. No sé de dónde tomó la frase; pues al menos yo no la escuché en ningún momento en voz de mis compañeros. Lo que sí se reiteró es que no se dialogaría con mercenarios, que tienen la agenda de quienes les pagan. No son interlocutores creíbles. En su mayoría incluso se oponen al cambio de política iniciado por Obama y al levantamiento del bloqueo.”
Sólo discrepo con Elier cuando afirma “Ravsberg se equivoca”. Ravsberg no se equivoca, él hace su trabajo. Su postura no tiene nada que ver con si hubo más o menos tolerancia con la contrarrevolución en la Cumbre de Panamá sino con la descalificación de nuestro sistema político donde, según él, “no hay espacio para la mayoría de las cubanos”. Previo a la Cumbre de Panamá se  le escapó su verdadera opinión al decir a Harold Cárdenas Lema, del blog La Joven Cuba, en Facebook:
“Es que solo va la sociedad civil que apoya totalmente al gobierno y la que lo rechaza de forma drástica. Lamentablemente en Cuba aun no hay espacio para la mayoría de los cubanos que se ubican en medio de esos extremos.”
Harold le respondió desmarcándose de la cómoda equidistancia donde Ravsberg lo quería colocar,
“también desde la crítica, como hacemos nosotros… se “apoya totalmente al gobierno”. Estoy orgulloso de ese apoyo, lo que lamentablemente no sea con la dosis de obediencia que algunos esperan. No creo que Guiteras o Mella nos enseñaran a hacerlo de otra manera.”
Gracias a Harold por hacerme imaginar lo que dirían los nada equidistantes Mella y Guiteras de nuestro compañero Ravsberg. Como argumenté extensamente en el post “Cuba: La hoja de ruta y la tecera vía“, con la contrarrevolución visiblemente desprestigiada ante los cubanos hay un plan de construcción de una equidistancia imposible entre los que sirven explícitamente a Estados Unidos y la instituciones de la Revolución, donde deben aflorar los ejecutores de la ¿nueva? estrategia. Es parte del diseño que se hizo previamente a la Cumbre de Panamá y fue expuesto poco antes y argumentado en El Nuevo Herald de Miami: ni muy rápido ni muy despacio, ni cambios exclusivamente económicos ni exclusivamente políticos, ni “oficialistas”, ni “disidentes”…
Por qué Ravsberg -en vez de llamar a un diálogo entre asalariados de EE.UU. y patriotas cubanos, haciéndolo equivaler con el sostenido entre Obama y Raúl- no dice que el presidente Raúl Castro expresó en la Cumbre del ALBA en Caracas sobre la participación de los revolucionarios cubanos en Panamá:
“La sociedad civil cubana será la voz de los sin voz y desenmascarará a los mercenarios que presentarán allí como sociedad civil de Cuba y a sus patrones.”
Sus elogios a Raúl, seguidos de sus ataques a la delegación de la sociedad civil cubana a Panamá, como sus alabanzas al compañero Díaz Canel -dignas de aparecer en la revista Corea hoy-, seguidas de sus cuestionamientos al Departamento ideológico del Comité Central del Partido que éste atiende como Miembro del Buró Político, ilustran el equilibrismo del que sabe nadar y guardar la ropa.
Creo que sí, que debemos revisar autocríticamente el funcionamiento de nuestra prensa y particularmente el manejo que hicimos de las posibilidades de internet para la comunicación política en un escenario tan complejo como los Foros paralelos a la Cumbre de Panamá, a la que salvó de cualquier distorsión  la estelar e incensurable intervención de Raúl en la reunión de presidentes, pero no siguiendo el dictado de quien dista de compartir nuestros objetivos.
Dos comentarios en Cubadebate al texto de Elier replicado allí dan, desde una perspectiva comprometida con la verdad, el rumbo para lo que debemos mejorar:
Maria Jimenez dijo:
Mas claro ni el agua. Lo unico que te falto para estamparlo fue poner los vinculos a los datos que refieres, como los videos en youtube o los tabloides o entrevistas. Una idea, si ya sabemos que la prensa esta para el show y que va a sesgar u ocultar la informacion que le damos por qué no grabar nosotros mismos esa informacion en el momento que se la damos y luego publicarla nosotros mismos en youtube, blogs, o canales similares. Quiero decir, qué tan dificil puede ser que cuando uno de nosotros este dando una declaracion, otro este grabandolo aunque sea con un telefono y luego no importa si los medios intentan ocultarlo, nosotros mismos lo publicamos. Hasta sin editar, vaya. Ahora mismo, esas mismas provocaciones que expones, las cosas que hicieron, que sucedieron, tu mismo dices que la prensa estaba alli, de antemano, presta para coger lo que “iba” a pasar y como no pasó nada, pues no se enteró nadie. Bueno, pues por qué no hacer lo mismo nosotros? Vamos a grabar lo que en realidad sí paso y lo ponemos en el aire.
joseantonio dijo:
Elier: Gracias por tu artículo, muy esclarecedor. A los demás foristas comentarles que el Sr. F. Ravsberg no es ningún improvisado, es un buen periodista, solo que trabaja para medios que adversan a Cuba, por lo que, si pretende cobrar, otra cosa no puede escribir.
Coincido con María Jiménez, hay que ser proactivos. Nuestros medios y sus periodistas deben ser dotados de más independencia, poder de decisión y responsabilidad sobre su política editorial, para que tomen sus riesgos, estén siempre a la ofensiva y no a la riposta, pues cuando desde otros medios nos tergiversan los hechos, cuesta más trabajo realizar el control de daños.
Eso lo saben muy bien los periodistas extranjeros y, sobre todo, los que ejercen su profesión desde nuestro país.
Repito que como sugirió hace algún tiempo  El heraldo de Cuba, en un post titulado “Mami, ¿qué será lo que quiere Ravsberg?“: “una lectura avisada de sus posts revela que más que “Cartas desde Cuba” se trataría de “Cartas a los cubanos”” con los ingresos, los recursos y el posicionamiento que le ofrece su labor para un medio extranjero.
Fernando Ravsberg no puede ser para nada una víctima de los jóvenes que han sido descritos por él en equivalencia con terroristas, asesinos y asalariados de EE.UU. y a quienes cuestionó su representatividad:
 “¿Entonces a quién representan esos dos grupos que aparecieron en Panamá a nombre de la “sociedad civil cubana” y terminaron dando un lamentable espectáculo de provocaciones, insultos y golpes, el cual recorrió el mundo empañando la imagen de la nación?
“Por parte de Cuba fueron dirigentes de organizaciones de la sociedad civil, los cuales desconozco cómo se escogieron. Lo que sí quedó muy claro es que no representan el espíritu mayoritario de la sociedad, aunque sean representantes institucionales.”
En todo caso sería víctima de sí mismo, de sus manipulaciones e intereses. Deberíamos preguntarnos si quienes fueron víctimas de semejante insulto no pueden contestar y tratar de establecer respetuosamente la verdad sin que caiga sobre ellos la acusación de ser cazadores de brujas. Muy mal andamos y peor estaremos si pedimos a nuestros jóvenes que callen cuando la calumnia se lance sobre ellos y las instituciones que le confian su representación.
Ellos no han golpeado a nadie ni dicho ninguna mentira sino que han intentado establecer la verdad escamoteada sobre lo ocurrido en Panamá y como dice Paco Ignacio Taibo II en su excelente serie para TeleSUR son, en esta disputa, “Los nuestros”.
Ravsberg, creo yo, no es nuestro compañero. Aunque tal vez sí lo sea de otros, los que antes de la Cumbre de las Américas ya andaban diciendo, como él,  que aquí “no hay espacio para la mayoria de los cubanos”. Es curioso, cuando el ecuatoriano Rafael Correa decía en Panamá -recordando a José Martí– “ha llegado para América Latina la hora de su segunda independencia”, algunos creen que para Cuba es el momento de “ni con esto ni con aquello”.