45 años del Primer Congreso:
Unidad nuestra brújula
Rodobaldo Martínez Pérez
rodobaldo@ahora.cip.cu
Los comunistas cubanos realizan su primer Congreso a 16 años del triunfo de 1959 y a 10 de la constitución del primer Comité Central, para volver a hablar de la suprema importancia de la unidad, desde un análisis histórico de la Revolución, como continuidad de las primeras luchas por la independencia desde 1868.
El desempeño de la política exterior de Cuba, basada siempre en la firmeza de principios y la solidaridad, también, sobresale en el debate del histórico Primer Congreso del Partido Comunista de Cuba, efectuado desde la mañana del 17 hasta el 22 de diciembre de 1975, en el teatro Karl Marx, en Ciudad de La Habana, hace 45 años.
Antes,
durante y después del Congreso hay un amplio movimiento de masas, para participar
en las tomas de decisiones vitales que definen el destino de la Nación,
En el debate, con unos 5 000 delegados e invitados, presentes en el cónclave, mencionan, críticamente, los errores cometidos en esos años en revolución. Examinan la proyección del Sistema de Dirección de la Economía, el rumbo previsto para el futuro del país, el desarrollo social, educación, cultura, deporte, salud, investigaciones científicas, atención a la infancia, seguridad social, política laboral, el sistema judicial, sobre la política internacional, los estudios del marxismo-leninismo en Cuba y el desempeño de los medios de difusión masiva.
Todo pensado meticulosamente para lograr la intención de Fidel cuando reitera: la importancia de organizarse bien, desde la mejor institucionalización, con los organismos adecuados para poder marchar adelante, según los objetivos de este primer Congreso, que destaca, en las palabras del Comandante en Jefe: “a la gran cohesión, a la gran fraternidad que ha existido siempre entre todos los revolucionarios”,
Después de leído, por Fidel, el extenso informe centran, aprueban las Tesis, las Resoluciones y la Plataforma Programática del Partido, explican la trascendencia en el orden político, institucional y jurídico de la próxima Constitución de la República, como base de un ejercicio superior de la legalidad socialista, que fue aprobada en un referendo nacional, el 15 de febrero de 1976, con el 98 por ciento de votación de los electores y la conformidad del 97,7, la cual define el papel del Partido en la sociedad cubana.
Destacan, además, el desempeño en el proceso de las organizaciones de masas y sociales, de las Fuerzas Armadas Revolucionarias, del Ministerio del Interior, de la Unión de Jóvenes Comunistas y del Partido.
En cuanto al funcionamiento del Partido aprueban los Estatutos y la Política de formación, selección, ubicación, promoción y superación de los cuadros y, en el ordenamiento del país, ratifican la nueva División Político-Administrativa, los órganos del Poder Popular, así como directivas para el desarrollo económico y social en el quinquenio 1976-1980.
Entre las proyecciones sobresalen la cultura artística y literaria, la cuestión agraria y las relaciones con el campesinado, el pleno ejercicio de la igualdad de la mujer, la formación de la niñez y la juventud , la importancia de la unidad de las fuerzas progresistas y la celebración, en Cuba, del el XI Festival Mundial de la Juventud y los Estudiantes, en julio de 1978.
Seleccionaron la ampliación del Buro
Político, encabezado por Fidel, e integrado por Raúl Castro
Ruz, Juan Almeida Bosque, Osvaldo Dorticós Torrado,
Guillermo García Frías, Armando Hart Dávalos, Ramiro Valdés
Menéndez, Sergio del Valle Jiménez, Blas Roca Calderío, José
Ramón Machado Ventura. Carlos Rafael Rodríguez Rodríguez, Pedro
Miret Prieto y Arnaldo Milián Castro.
En el llamado el Congreso del Pueblo, con
la inmensa alegría de más de un millón de cubano,s en le Plaza de la Revolución, ratifica los acuerdos del evento, a los integrantes del Comité Central, del
Secretariado y la ampliación del Buró Político.
Fidel, recién ratificado primer secretario del Comité Central del Partido, en el discurso de clausura asegura: “… estamos seguros de que después de nuestro Congreso todo será todavía más sólido, más seguro, y que los principios más puros del marxismo-leninismo, los principios más profundos de nuestra Revolución se aplicarán de manera consecuentes, que esta generación revolucionaria habrá dejado las bases, y que permitirá a los jóvenes y a los niños del futuro seguir, como herederos de esta Revolución, la marcha victoriosa de nuestra patria hacia el futuro”.
Comunica la noticia de la muerte, en Angola, del comandante Raúl Díaz Argüelles, uno de los principales dirigentes de las tropas internacionalistas cubanas que combaten en defensa del hermano país africano.
Acentúa Fidel el importante papel de la política exterior de Cuba, basada en la firmeza de principios y la subordinación de las posiciones cubanas a las necesidades internacionales de la lucha por el socialismo y la liberación nacional de los pueblos, al tiempo que llama a la unidad de las fuerzas progresistas.
Durante estos históricos seis días el espíritu solidario de los cubanos asciende con fuerza en apoyo a los gobiernos progresistas, a los movimientos revolucionarios de África y al pueblo de Puerto Rico.
En estos 45 años lo acaecido en este Congreso constituyen consultas permanentes, para las actuales generaciones de cubanos y continuidad de la formación del Partido Revolucionario, de Martí, del primer Partido Comunista, de Mella y Baliño, así como de la creación, el 3 de octubre de 1965, del primer Comité Central del PCC, donde Fidel leyera la carta de despedida de Ernesto “Che” Guevara.
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