Dra. Noemi
Caridad Rodríguez Pupo y Brigada Medica cubana en Minas Gerais
Con las ansias de ayudar a los más necesitados del
pueblo brasileño y respondiendo al programa gubernamental de ese país, Más
Médicos, llegaron, días atrás, 59 galenos holguineros a Belo Horizonte, capital
de Minas Gerais, como parte de los cuatro mil doctores que enviará Cuba para
contribuir a elevar la calidad de vida de un país rico, pero donde la inmensa
mayoría del pueblo es aún pobre.
Siempre tuvimos los deseos de conocer el gigante sudamericano, que cada vez crece más y se hace más fuerte, con el que poseemos una afinidad histórica, y cultural.
Tras el recibimiento en Sao Paulo nos trasladamos a la hospitalaria Belo Horizonte, capital de Minas Gerais, fundada el 12 de diciembre de 1897, con una población de 2,4 millones de habitantes.
Con un área de 331 kilómetros cuadrados, la ciudad transita entre la tradición y la modernidad y está considerada la capital de la gastronomía de Brasil. Con un clima agradable, la urbe de reconocido desarrollo cultural será una de las sedes en el 2014 del Mundial de Fútbol.
Llegamos a Sesc Venda Nova, un centro de Servicio Social de Comercio, complejo institucional creado para el bienestar social y la mejoría de la calidad de vida de los trabajadores del comercio, los bienes y los servicios que promueve el cuidado del medio ambiente, la cultura, la salud y la alimentación natural, centro de montañas rodeado de vistas pintorescas, donde nos recibieron junto a otros 450 médicos cubanos.
Los mineros nos recibieron con los brazos abiertos, nosotros con el cansancio del viaje pero con el corazón en la mano, para aquellos hermanos que allí nos esperaron y nos dieron su calor humano.
Al llegar somos interrogados de por qué hoy estamos en Brasil. Los colegas responden: en primer lugar porque nuestra Medicina cuenta con una gran fortaleza y es su capital humano, formado en los principios humanistas e Internacionalista, está dispuesto a brindar sus servicios donde se necesite.
Sin escatimar esfuerzos ni recursos, nuestra estrategia de salud tiene como principio primario la prevención, y en segundo lugar nuestro servicio contribuirá con la economía cubana.
La mayor de las Antillas no posee las riquezas materiales del gigante sudamericano, pero sí con el conocimiento científico, la riqueza humana y espiritual para mejorar la salud de los más necesitados en cualquier parte del mundo
Siempre tuvimos los deseos de conocer el gigante sudamericano, que cada vez crece más y se hace más fuerte, con el que poseemos una afinidad histórica, y cultural.
Tras el recibimiento en Sao Paulo nos trasladamos a la hospitalaria Belo Horizonte, capital de Minas Gerais, fundada el 12 de diciembre de 1897, con una población de 2,4 millones de habitantes.
Con un área de 331 kilómetros cuadrados, la ciudad transita entre la tradición y la modernidad y está considerada la capital de la gastronomía de Brasil. Con un clima agradable, la urbe de reconocido desarrollo cultural será una de las sedes en el 2014 del Mundial de Fútbol.
Llegamos a Sesc Venda Nova, un centro de Servicio Social de Comercio, complejo institucional creado para el bienestar social y la mejoría de la calidad de vida de los trabajadores del comercio, los bienes y los servicios que promueve el cuidado del medio ambiente, la cultura, la salud y la alimentación natural, centro de montañas rodeado de vistas pintorescas, donde nos recibieron junto a otros 450 médicos cubanos.
Los mineros nos recibieron con los brazos abiertos, nosotros con el cansancio del viaje pero con el corazón en la mano, para aquellos hermanos que allí nos esperaron y nos dieron su calor humano.
Al llegar somos interrogados de por qué hoy estamos en Brasil. Los colegas responden: en primer lugar porque nuestra Medicina cuenta con una gran fortaleza y es su capital humano, formado en los principios humanistas e Internacionalista, está dispuesto a brindar sus servicios donde se necesite.
Sin escatimar esfuerzos ni recursos, nuestra estrategia de salud tiene como principio primario la prevención, y en segundo lugar nuestro servicio contribuirá con la economía cubana.
La mayor de las Antillas no posee las riquezas materiales del gigante sudamericano, pero sí con el conocimiento científico, la riqueza humana y espiritual para mejorar la salud de los más necesitados en cualquier parte del mundo
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