Verdadera voz de Cuba

#Holguín, presencia de la sociedad civil cubana en el desfile del Primero de Mayo  del 2014

Rodobaldo Martínez Pérez

rodo@enet.cu

Entre los 2 mil representantes de los movimientos sociales participantes en la llamada contracumbre,  en Panamá durante los días 10 y 11, está Cuba. Nuestra  sociedad civil va a mostrar la realidad de la nación caribeña, desde  sus organizaciones de masas, juveniles, de profesionales, grupos religiosos, científicos, culturales, deportivos y  de amistad. 

Hablaremos de un territorio de esa Patria Grande, no de forma idílica, porque dificultades tenemos, pero sí de manera realista transmitir cuanto hacemos para materializar el sueño de hacer un país humanista y solidario, pese a las dificultades enfrentadas como el bloqueo yanqui, y proteger la dignidad de los hombres, entre los principios.
Haremos coro  con  esa importante masa, interesada en discutir,  esta vez, el enfrentamiento al intervencionismo en Venezuela, libertad sindical, seguridad social y pensiones, pueblos originarios, educación, juventud y los derechos de la mujer.

Nuestra sociedad civil existe como complemento  al Estado Cubano y no en contraposición,  porque no está pugna con él. Se corresponde al modo de producción y desarrollo de las fuerzas productivas imperantes en nuestro país y trabaja, de mutuo acuerdo, con las instituciones estatales en el desarrollo y fortalecimiento de la democracia.

Tras los argumentos de la inexistencia de esta estructura,  esconden los intentos de división de la sociedad cubana, de llevar al país al pasado y convertirnos de nuevo en neocolonia. En resumen es contraponer la sociedad civil socialista a una capitalista.

La representación de la Isla, en Panamá,  tendrá otros grandes retos: No dejarse ocupar ni el más mínimo espacio de su responsabilidad de exponer y  defender la verdadera situación cubana, ante el Continente y dejar sin voz a quienes pretendan adueñarse de micrófonos, para pintar una realidad cubana diseñada por los que mal nos quieren.

La llamada sociedad civil no es un término nuevo, tiene siglos,  sólo que, ahora, resurge convertida en un arma de diversionismo ideológico, para atacar  a la Revolución Cubana y eso debe de ponernos en guardia a la hora de enumerar armas para la salvaguarda.
Como una muestra más de los verdaderos propósitos, vayamos al 6 de mayo del 2004, cuando W.  Bush presidente entonces de los Estados Unidos dijo: “Disponer de 59 millones de dólares en los próximos 2 años para financiar las acciones dirigidas a la destrucción de la Revolución. Este dinero sería utilizado para crear un fondo internacional para el desarrollo de la sociedad civil en Cuba…”
La idea de utilizar una fuerza interna, para atacar el Estado y cualquier tipo de orden, está entre los métodos para socavar el Sistema cubano, por eso bajo el nombre de sociedad civil, agrupan unos mercenarios, que  cumplen la orden de tratar de desprestigiar a la sociedad cubana.
Ese es el show pretendido armar en el foro de los pueblos, paralelo a la VII Cumbre de las Américas: la utilización de parte de la disidencia, con ropaje oficial, para atacar a la Obra conquistada en 1959 y minimizar a nuestros representantes. En ellos confiamos como la verdadera voz de Cuba.