Rodobaldo Martínez Pérez
rodo@enet.cu
Al borde del cinismo, el gobierno de Estados Unidos
plantea ahora, cuando en la ONU discuten
el bloqueo yanqui contra Cuba, “su no interferencia”, para que nuestro país comercie con quien
quiera.
Descaro mayor no hay para decir semejante cosa, a
sabiendas que el acoso financiero es una de las características de este cerco
económico al archipiélago caribeño. La realidad de interferir en el comercio
con terceros países, con la consabida práctica de limitar la entrada aquí de
recursos provenientes de filiales norteamericanas ubicadas en otras naciones es
altamente conocida.
Eso hace que lo que podemos traer a poca distancia
lo debemos comprar en lugares lejanos, con mucho mas costo.
El
por qué se implantó esta medida unilateral sigue siendo el mismo: (...) el
único modo previsible de restarle apoyo interno es a través del desencanto y la
insatisfacción que surjan del malestar económico y las dificultades
materiales(...) hay que emplear rápidamente todos los medios posibles para
debilitar la vida económica de Cuba(...) una línea de acción que, aun siendo la
más mañosa y discreta posible, logre los mayores avances en privar a Cuba de
dinero y suministros, para reducirle sus recursos financieros y los salarios
reales, provocar el hambre, la desesperación y el derrocamiento del
Gobierno".
Pero pongamos ejemplos de que Cuba no puede comerciar con quien quiera, como
dice el Norte: Durante el mes de agosto 2018, la Asociación vasca de amistad y
solidaridad Euskadi-Cuba, denunció el rechazo del banco alemán, Deutsche
Bank, de una ejecutar una transferencia ascendente a 6 mil 800 euros, destinada
a la Fundación “Un mundo mejor es posible”, ONG de Buenos Aires que coordina
junto al gobierno de Cuba, varios programas de salud y alfabetización en
Argentina.
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| #NoMásBloqueo |
Esos euros los remitían con el propósito de equipar el Centro Oftalmológico
“Ernesto Che Guevara”, ubicado en la ciudad de Córdoba, donde miles de
argentinos han recuperado su visión gracias a la solidaridad cubana.
En 2015 Deutsche Bank fue multado por Estados Unidos con
258 millones de dólares por haber ejecutado trasferencias cubanas. La Asociación de amistad Euskadi-Cuba negoció
el envió con el banco italiano Unicredit, en Milán, pero dicho
banco también se negó a realizar la transferencia de 3 mil 500 euros.
El banco alemán Commerzbank AG, en Frankfurt, no quiso
realizar el pago de una subvención de 7 mil euros, a la Fundación argentina “Un
mundo mejor es Posible”.
En 2017, el banco holandés ING Bank, se negó a transferir 60
mil euros de la Asociación de Amistad alemana RFA-Cuba, destinado a familias
cubanas damnificadas por el huracán Irma.
Ese banco, en 2012 recibió una sanción de 619 millones de dólares por
realizar transacciones con Cuba y el Departamento del Tesoro lo obligó a romper
sus relaciones comerciales con la Isla.
La multinacional sueca, Ericsson, especializada en las
telecomunicaciones, tuvo que pagar una multa de 1,75 millones de dólares por
reparar, mediante su filial basada en Panamá, equipos cubanos de un valor de
320 mil dólares.
En julio 2012, el Departamento del Tesoro multó en 1,35 millones de dólares,
a la empresa estadounidense Great Western Malting Co. por vender
entre agosto 2006 y marzo 2009, cebada a Cuba a través de sus filiales
extranjeras.
La guerra financiera pretende ahogar la economía cubana, siguiendo las
recomendaciones de Lester Mallory, subsecretario de Estado para el hemisferio
occidental, en abril de 1960:
¿Podemos comerciar con quienes queramos?, claro que no y eso los yanquis lo
saben bien. El boqueo, para nada
embargo, porque es una guerra económica que involucra a terceros, es un
genocidio, que afecta todas las esferas de la sociedad cubana el mayor obstáculo
a nuestro progreso y sus pérdidas en más de medio siglo asciende a 930 mil millones
de dólares.
La solidaridad y el respaldo mayoritario de la comunidad internacional
sobresale hoy en la ONU y Cuba lo agradece. La votación a nuestro informe:
Necesidad de poner fin al Bloqueo económico, comercial y financiero impuesto
por los Estados Unidos contra Cuba fue de 189 a favor, 2 en contra, los de
siempre, y dos países se ausentaron.
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