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| #FidelinauguraVocacionalJoséMartíenHolguín |
Rodobaldo Martínez Pérez
rodo@enet.cu
Aquel jueves primero de septiembre de 1977 comienza,
en Cuba, el curso escolar 1977-78 y, como dato significativo, Fidel inaugura en Holguín el IPVCE José Martí Pérez en la visita 30 a su tierra natal.
Hace 40 años de aquel suceso, cuando la incesante
lluvia constituye la eterna acompañante de
tan memorable hecho y, desde aquel entonces, la entrada a la ciudad, vía a Mayarí, tuvo una fisionomía distintiva con la estatua del Maestro de pie, presidiendo la
geografía en su mismo umbral.
Para mayor exactitud, a partir de ese momento,
Holguín tuvo un nuevo centro situado en el extremo más oriental de su capital,
con límites en los barrios San Rafael,
Cayo Mayabe y la Comunidad Militar Hermanos Aguilera.
Momentos previos de pronunciar su discurso para
dejar abierta oficialmente esta construcción emblemática de la Educación del
país, el Líder de la Revolución conversa con una estudiante ante la maqueta de
la escuela y se interesa por la estructura de la colosal instalación con más de
90 mil metros cuadrados de edificaciones y un área de caballería y media de
extensión.
El aguacero revelaba su intensidad y el
Comandante en Jefe dice en su discurso: “Algunos tal vez piensen que la lluvia
nos aguó la fiesta (EXCLAMACIONES DE: "¡No!"), pero realmente no es
así. ¡Estamos contentos, muy contentos! Hacía tanto tiempo o tantos meses que
no llovía por esta zona norte de Oriente, donde la primavera fue seca, que nos
alegramos mucho de que haya llovido fuerte en estos días.
“Así crecen las cañas, crecen los pastos, se llenan las presas y
micropresas, y se producen más vegetales, más viandas y más alimentos.
¡Bienvenidas sean las lluvias en el norte de Oriente! Y por eso, aunque mojados,
nos sentimos doblemente felices en el día de hoy.
“Aquí no hay quien saque un papel. Yo, de todas maneras, tenía algunos
apuntes por aquí, algunos datos, no muchos, los mínimos, los necesarios para
comprender lo que significa nuestra escuela y nuestro curso escolar”.
La provincia tuvo con la Vocacional, el equivalente a 12 secundarias básicas en el
campo y un centro dotado de las más inimaginables condiciones para estudiar.
Aulas, laboratorios, talleres para la Educación Laboral, áreas deportivas, dormitorios, comedores,
anfiteatros, salas de círculos de interés, biblioteca, entre otros, formaban
parte de aquel útil entramado.
Fue momento propicio para reconocer el esfuerzo de los constructores,
protagonistas de esa hazaña y responsables de dejar listos otros planteles con
vista al año académico que comenza.
Con el honroso nombre del HéroeNacional empieza a funcionar “la José
Martí”, una institución docente que con
los años ocupa uno de los más altos pedestales en el Sector y prestigia al
territorio sus cientos de miles de
prestigiosos profesionales egresados. Vídeo
El IPVCE holguinero sobresale, en
estos 40 años ,como un sitio vinculado a horas y horas de intenso estudio, magníficos
profesores, nostalgias por lo vivido allí y lugar de solidaridad espontánea,
porque se compartía desde una libreta hasta una cacharra con comida.
El uniforme azul y el emblema rojo en la manga nunca se apartará de los
recuerdos. Ese será un eterno vestuario juvenil y la ropa ligada a unos de los
mejores tiempos de cualquier existencia.
Es el homenaje permanente al hombre
que tanto escribió para niños y jóvenes. Quien diseña el futuro de la Patria de
manera maestra y subraya el papel de la educación en las nuevas generaciones.
Martí con su constante mirada al futuro supo resumir en
una frase el significado de aquella obra: “Los sueños de hoy serán las
realidades mañana”.Vídeo.
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